Eric Zárate es un chaval de 20 años, que sueña con ser futbolista profesional, como otros muchos. Pero según parece a Eric se le da bien, hasta el punto que este verano la UE Lleida se fijó en el y le hizo un contrato. Todo un sueño, un equipo de Segunda B, la puerta al fútbol profesional y quien se sabe también si un futuro mejor para el y su familia.
Pero el sueño se truncó. Un periodista con ínfulas de obispo, algo que por otra parte no es nada raro. Sacó unos muy desafortunados tweets del chaval, cuando tenía 15 años, con el consiguiente revuelo en las redes sociales. En esta puta teocracia de lo políticamente correcto en la que vivimos instalados, el juicio de las redes es mas que suficiente para que en un acto de gallardía y valentía la entidad deportiva de Lleida se bajara los pantalones y rescindiera el contacto del chaval.
En España con 15 años uno no es responsable de sus actos, por lo tanto si comete un homicidio intencionado no va a la cárcel. Sin embargo unos tweets con 15 años te condenan de por vida a ser considerado un racista, un machista o un catalanófobo. Sobre la actitud de la UE Lleida poco a añadir, viven de las subvenciones públicas, como todo club deportivo del oasis de Itaca, por lo tanto se deben a la mano que les da de comer, de eso sabe mucho el rapero revolucionario Pablo Hasel. Lo siento mucho por la noble afición de esa entidad, pero espero que sigan muchos años siendo un equipo de Segunda B, al menos mientras dirija la entidad dirigentes de Tercera como han demostrado ser.
El caso Zárate, me ha hecho acordarme, de Pepe Rubianes. Un cómico, la palabra actor me parece presuntuosa en su caso y yo la reservaba para gente como Josep Maria Pou, fallecido ya y que es muy querido por la "ceba". En especial desde que un programa de TV3 dedicó una serie de agravios a España, entre ellos "Puta España". Y he aquí la diferencia mientras a Eric Zárate, su incontinencia tuitera adolescente le ha costado el contrato de su vida, al cómico ya crecidito cuando dijo lo que dijo, no solo no le costó ningún contrato, sino que muchos ayuntamientos de esos que tienen un teatro que solo funciona para la fiesta mayor corrieron a contratar sus servicios y alcaldes y regidores en primer fila se desternillaban ante el humor de mal gusto del cómico gallego y al terminar la función seguro que nadie se atrevía a ser el primero en dejar de aplaudir. Para quien no lo sepa en la clase dirigente de Cataluña profunda hay un competición para demostrar quien es más catalán al amo, y en la no profunda por perdonarse el hecho de serlo poco
A chaval de 15 años lo condenamos y lo marcamos de por vida, al burgués "revolucionario" (otro hecho diferencial catalán), le premiamos, lo defendemos con la cacareada libertad de expresión y lo convertimos en un mito, que al fallecer elevamos a los altares de la "ceba", con homenaje "tevetresero" incluido.
Y luego dirán que el "pruses" viene de abajo del pueblo y que es transversal. Viva Rubianes y muera Zárate.
No hay comentarios:
Publicar un comentario